lunes, 9 de mayo de 2011

La evolución de algunas ramas de la enseñanza

La enseñanza de la filosofía, la enseñanza de las lenguas clásicas y el problema de las humanidades



A lo largo del tiempo una variedad de disciplinas han intentado revisar sus métodos y técnicas de aplicación, con el fin de implantar nuevas formas de enseñanza. A partir de 1935 se inicia una serie de indagaciones para comprender de qué manera están aportando áreas como la filosofía y las lenguas clásicas al desarrollo del aprendizaje en la educación, por ende el propósito del presente texto busca mostrar un panorama de lo que ha sido la evolución y trasformación interna de algunas ciencias, con el objetivo de que los alumnos comprendan las innovaciones y el nuevo lenguaje que se utiliza en distintas áreas educativas (Piaget, 2001).

En primera instancia Piaget destaca la importancia de la enseñanza de la filosofía, ya que si la educación moderna pretende formar sujetos con una calidad alta respecto al nivel espiritual, es necesario considerar la enseñanza de ésta ciencia, puesto que ésta conlleva a la reflexión y desarrolla un pensamiento profundo, tanto para estudiantes que practiquen ciencias más objetivas como las matemáticas o ciencias más subjetivas como las humanidades. La filosofía es sinónimo de sabiduría, por lo que se plantea como una ciencia que contribuye a la interiorización  de valores, centrándolos como elemento primordial tanto para el ser como para el conocimiento (Piaget, 2001).
El desafío que se presenta dentro de éste campo consiste entonces en la discrepancia entre  la filosofía y el espíritu investigativo o científico, por ende se ha intentado responder a esta problemática con la inserción de la filosofía en diferentes aplicaciones científicas, con el propósito de lograr la integración de dos elementos importantes dentro de la educación. En algunos países como Suiza,  se han incorporado clases de filosofía en las facultades tanto de ciencias como de literatura, para limar asperezas y hacer frente a las  limitaciones entre las distintas disciplinas (Piaget, 2001).
Otro reto que se presenta en la actualidad dentro de la educación, es la enseñanza de las lenguas clásicas y los problemas de las humanidades.  Las humanidades y las lenguas clásicas a diferencia de la rama anterior (la filosofía) han tenido pocas trasformaciones, razón por la cual no se ha visto alterada su enseñanza. El problema aquí radica en que estas se han dejado de lado en algunas disciplinas, en las cuales es de vital importancia retomarlas. Por ejemplo, en la medicina es importante reconocer la terminología en las distintitas lenguas, por ende en algunos países como Varsovia se han impuesto clases obligatorias de latín para la formación de futuros médicos (Piaget, 2001).
 Como se mencionaba anteriormente la educación debe hacer énfasis en el nivel espiritual de los estudiantes, y la integración de las lenguas clásicas en éste proceso puede contribuir en  gran medida para hacerlo posible. Las lenguas muertas actúan como una base para el desarrollo de habilidades intelectuales que pueden ser utilizadas para realizar otras actividades. Sin embargo, el conocimiento sobre estas lenguas es mínimo, por lo que la conferencia internacional de instrucción pública, ha decidido que el estudio de los textos griegos y latinos en las instituciones puedan ser traducidos y leídos en la lengua local de cada lugar del mundo, ya que en la modernidad los estudios realizados por las civilizaciones antiguas, solo están siendo aprovechados desde la rama de la sociología (Piaget, 2001). 
Concluyendo es importante resaltar que la educación ha tenido una larga evolución durante las distintas épocas históricas, por lo que se debe tratar de integrar todos los conocimientos, métodos y formas de aplicación tanto clásicos como modernos, logrando así no dejar atrás los conocimientos antiguos y reestructurarlos con los modernos, de manera que la educación sea cada vez más completa y brinde un proceso de enseñanza amplio y complejo que beneficie al alumno en el desarrollo de habilidades para aplicarlas en todas las ramas de la educación (Piaget, 2001). 




Referencias

Figueiras, S. (2004). Educación, aprendizaje y cognición: teoría de la práctica. México: Manual Moderno

Flórez, Castro y Arias (2009) comunicación, lenguaje y educación: una mirada desde las teorías de la complejidad. Folios, 2 (30), 25-38
Geertz, C. (1973). The interpretation of culture. Nueva York: Basic Books.

Piaget, J. (2001). Psicología y pedagogía. Barcelona: Editorial Critica

Resnik, L & Collins, A (1996) Cognición y aprendizaje. Anuario de psicología, 69, 189.197.

Salomon, G. (2001). Cogniciones distribuidas: Consideraciones psicológicas y educativas. Buenos Aires: Amorrortu Editores

Santos, M. & Guillaumin, A. (2006). Avances en complejidad y educación: teoría y práctica. Barcelona: Octaedro


Vygotsky, L. (1998). El desarrollo de los procesos psicológicos superiores. Barcelona: Editorial Critica. 

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